La ira: Comprendiendo su origen y aprendiendo a gestionarla

EMOCION DE IRA

La ira es una emoción compleja y potente que todos experimentamos en algún momento de nuestras vidas, ¿Verdad?.

Ésta, puede surgir de manera súbita, desencadenada por una injusticia percibida, frustración o amenaza. Aunque la ira es una respuesta natural, su manejo inadecuado suele tener consecuencias devastadoras en nuestras relaciones y bienestar general.

¿Qué es la ira y cómo se manifiesta?

La ira es una respuesta emocional caracterizada por sentimientos de antagonismo hacia alguien o algo que percibimos nos ha perjudicado. Es una emoción multifacética que puede variar desde una ligera irritación hasta una furia intensa. Se manifiesta en las personas a través de una variedad de signos físicos y comportamentales, como:

  • Físicos: Aumento de la frecuencia cardíaca, tensión muscular, sudoración y enrojecimiento de la piel.
  • Cognitivos: Pensamientos de venganza, deseo de confrontación y percepciones distorsionadas de la realidad.
  • Conductuales: Gritos, agresividad verbal o física, y comportamientos destructivos.

El impacto de la ira en las relaciones

La ira no gestionada puede erosionar la confianza y la intimidad en las relaciones. Puede llevar a conflictos recurrentes, resentimientos acumulados y, en casos extremos, a la ruptura de relaciones. Las interacciones cotidianas pueden volverse tensas y hostiles, creando un ambiente tóxico que afecta a todos los involucrados.

Te voy a contar la experiencia de Luis A., un hombre de 60 años, que había pasado gran parte de su vida cargando una pesada carga de ira y resentimiento hacia su padre. Su infancia estuvo marcada por una relación tumultuosa con él, quien era severo y poco afectuoso. Los recuerdos de los gritos, las críticas constantes y el trato despectivo hacia su madre se habían arraigado profundamente en el corazón de Luis, moldeando sus creencias y emociones de manera negativa.

Desde una edad temprana, Luis se sintió atrapado en un hogar lleno de tensión y conflicto. Su padre, un hombre autoritario y crítico, no mostraba mucho cariño ni paciencia. Las palabras duras y el tono implacable con el que hablaba a Luis y a su madre crearon un ambiente de miedo y resentimiento. A lo largo de los años, Luis desarrolló una profunda ira hacia su padre, y que solo se intensificó con el tiempo.

A sus 60 años, Luis se encontraba en un punto crítico de su vida y decide hacer un proceso terapéutico conmigo.

El primer paso fue ayudar a Luis a identificar y aceptar las heridas de su infancia mediantes las técnicas de integración cerebral. Exploramos juntos sus recuerdos y los sentimientos de ira y resentimiento que había reprimido durante tantos años. Luis comenzó a comprender que su ira no solo estaba dirigida hacia su padre, sino también hacia sí mismo por no haber podido protegerse ni proteger a su madre. Y esa fue un gran toma de consciencia para transformarse.

Una vez identificadas las heridas, trabajamos con Psych-k en cambiar las creencias negativas que Luis había desarrollado sobre sí mismo y sobre las relaciones. Luis aprendió a reconocer que las acciones y palabras de su padre eran reflejo de sus propios problemas y no de su valor personal.

Implementamos técnicas de sanación emocional, como la programación neurolingüística, la visualización y el trabajo con el niño interior, donde aprendió a reconectarse con su yo infantil y a ofrecerle el amor y la protección que nunca recibió. Este proceso fue crucial para sanar las heridas profundas y comenzar a liberar el resentimiento acumulado.

Para mi Luis ha sido un ejemplo del poder sanador ante adversidades complicadas de la vida, sin importar nuestra edad ni creencias.

Origen de la ira

La ira puede tener múltiples orígenes. Analiza con cuál de ellos te sientes más identificado:

  1. Experiencias personales: Traumas pasados, abusos o experiencias negativas pueden predisponer a una persona a reaccionar con ira.
  2. Factores biológicos: Desbalances hormonales o ciertas condiciones neurológicas pueden influir en la propensión a la ira. Este factor podría saberse aplicando kinesiología.
  3. Factores psicológicos: Baja autoestima, problemas de manejo del estrés y habilidades deficientes de comunicación.
  4. Factores sociales y culturales: Normas culturales que valoran la agresividad o entornos sociales conflictivos.

5 Pasos efectivos de gestionar la ira:

  1. Reconocer y aceptar la ira: El primer paso es reconocer que estás enojado y aceptar esa emoción sin juzgarte. Este es siempre el primer y más importante paso para cualquier proceso terapéutico, ya que nuestra tendencia es boquear y evitar sentir aquellas emociones que no nos gustan.

  2. Ejercicio físico: La energía de la ira es una energía de gran dinamismo y acción, por lo tanto, practicar actividades de ejercicio cardio liberarán la tensión acumulada. Estos pueden ser, correr, spinning, saltar, nadar, etc.

  3. Ejercicios de liberación: Otras formas de liberar la ira, serán actividades y acciones de expresión corporal y vocal donde nos permitamos expresar los sentimientos en todo su estado. Ejemplo: * Gritar en un espacio abierto como el campo por ejemplo, permitiendo que salga y se reduzca la intensidad de la ira. * Utilizar un saco de boxeo para liberar las emociones. * Y algo tan sencillo como golpear una almohada o cojín permitiendo que se expresen las emociones contenidas.etc.

  4. Expresión constructiva: Aprender a comunicarse de manera asertiva para expresar lo que te molesta sin agredir.

  5. Pedir ayuda para reevaluar la situación: Hablar con un terapeuta o consejero para obtener estrategias y apoyo adicional.

La terapia cognitiva y energética: Un enfoque eficaz y rápido

La Terapia Cognitiva y energética es una de las intervenciones más efectivas para el manejo de la ira. Se centra en identificar y cambiar patrones de pensamiento negativos que contribuyen a la ira, asi como reestructurar todos los daños energéticos (Kinesiología del alma) que dichos patrones han causado. Este enfoque te enseña a:


  • Identificar eventos traumáticos: Poder acceder a aquellas situaciones que nos generan ira facilitará de forma muy eficaz liberar emocionalmente todo lo guardado y reprogramar nuestras experiencias de manera mucho más capacitante.

  • Identificar pensamientos irracionales: Reconocer pensamientos automáticos que pueden estar exacerbando la ira.

  • Reestructuración Cognitiva: Modificar esos pensamientos para que sean más racionales y menos emocionales.

  • Reestructuración Energética: Debido al impacto de las experiencias vividas  que han provocado la ira, entre otras emociones, nuestro campo electromagnético ha quedado dañado. Es importante reestructurar con kinesiologia del alma y fortalecerlo para reparar por completo nuestro sistema.

  • Desarrollo de Habilidades: Aprender y practicar habilidades de afrontamiento, como técnicas de relajación y estrategias de resolución de problemas.

Este enfoque terapéutico es particularmente efectivo porque no solo trata los síntomas de la ira, sino que también aborda las causas subyacentes y ofrece herramientas prácticas que se pueden aplicar en la vida diaria. Esto permite a las personas experimentar mejoras significativas en un periodo relativamente corto.

Conclusión

La ira es una emoción humana natural y necesaria, pero su manejo inadecuado puede tener consecuencias graves. Comprender su origen y aprender a gestionarla eficazmente es crucial para mantener relaciones saludables y un bienestar emocional equilibrado.

El enfoque terapéutico es probado y rápido para ayudar a controlar la ira y mejorar la calidad de vida. Al adoptar estrategias adecuadas y buscar ayuda cuando sea necesario, es posible transformar la ira en una fuerza constructiva y positiva.

terapia psychk malaga

kinesiologia del alma malaga

kinesiologia del alma benajarafe

havening techniques malaga

Kinesiologia malaga

terapia emocional malaga

Cómo mejorar tu intuición

como mejorar la intuicion

Cómo Mejorar tu intuición: Aprendiendo de Carl Jung

Carl Jung, eminente psicólogo suizo del siglo XX, plasmó en una ocasión una reflexión profunda que ha trascendido generaciones. La intuición es la percepción a través de la inconsciencia. Esta sentencia encierra un universo de significados que, al explorarlos, nos adentran en los intrincados laberintos de la mente humana.

La intuición, esa corazonada o presentimiento que surge sin un razonamiento lógico aparente, es un fenómeno singular y exclusivo para cada individuo. De acuerdo con Jung, estos sentimientos instintivos ofrecen una ventana única hacia nuestra propia naturaleza, como decimos en Kinesiología del Alma. Son como hilos sutiles que tejen la trama de nuestro ser, revelando aspectos profundos y a menudo desconocidos de nuestra psique.

El proceso de individuación, concepto fundamental en la obra de Jung, se erige como un viaje de autoconocimiento hacia el reconocimiento y la integración de nuestros atributos internos más singulares. Se trata de un arte, un camino de aprendizaje continuo en el que descubrimos nuestras metas, fortalezas y debilidades más íntimas. En este viaje hacia el ser auténtico, la exploración del inconsciente se revela como una etapa esencial.

Jung nos habla de la sombra, esa parte oscura y relegada de nuestra psique, que alberga los aspectos que tratamos de reprimir y negar. La ira explosiva, los celos, la envidia, la codicia, son sólo algunos de los atributos que yacen en las profundidades de nuestra sombra, esperando ser reconocidos. Sin embargo, ignorar o suprimir estos rasgos no implica su desaparición, sino más bien su fortalecimiento en las sombras.

Estos aspectos reprimidos pueden manifestarse de manera imprevista, dando lugar a explosiones emocionales, reacciones exageradas e incluso proyecciones injustas sobre los demás. Es en este contexto donde encontramos una fuente clave de nuestras intuiciones menos deseables. Esos sentimientos instintivos que nos asaltan sin previo aviso pueden tener su origen en las profundidades de nuestra sombra, reflejando los conflictos internos que aún no hemos resuelto.

Los arquetipos inconscientes juegan un papel sumamente influyente en la formación de nuestra intuición. Estos arquetipos, según la teoría de Carl Jung, son parte del colectivo, una forma de inconsciencia compartida por todos los seres humanos. Jung sostenía la opinión de que ciertas partes de la personalidad y características de un individuo están presentes desde el nacimiento, esperando ser desarrolladas y desplegadas.

Esta es la razón subyacente de las similitudes que encontramos entre personas de diferentes culturas, épocas y lugares. Los arquetipos son las tendencias naturales en nuestras mentes que nos ayudan a comprender y reaccionar ante el mundo que nos rodea. Un ejemplo emblemático de arquetipo junguiano es el del cuidador, el impulso humano innato de velar por el bienestar de los demás….seguramente te has visto en ese papel muchas veces.

Estos arquetipos inconscientes son fundamentales para entender nuestros sentimientos instintivos, y aprender a escucharlos puede ser transformador para nuestras vidas. Jung nos habla sobre la sombra y su arquetipo, enfatizando que la intuición no es simplemente una percepción o visión pasiva, sino un proceso activo y creativo.

Esta habilidad intuitiva no sólo nos revela aspectos del mundo exterior, sino que también nos permite entender y explorar nuestro mundo interior. Para mejorar nuestras intuiciones, Jung nos insta a familiarizarnos con nuestro inconsciente, especialmente a través del análisis de nuestra sombra. Este proceso se integra en la búsqueda de individuación, el cual podemos llevar a cabo mediante prácticas como la meditación, la autorreflexión, el análisis de sueños, terapia, impulsos y nuestro propio comportamiento.

Por ejemplo, mantener un diario de sueños puede ser una herramienta invaluable. Al registrar lo que recordamos de nuestros sueños, tan pronto como nos despertamos por la mañana, podemos desentrañar los mensajes que nuestro inconsciente nos envía mientras dormimos. Estas prácticas nos permiten acceder a las profundidades de nuestra psique, revelando insights preciosos sobre nosotros mismos y nuestro entorno.

Dormimos con la preocupación de que las fantasías, deseos y miedos que nos acechan nos preguntamos si llevamos demasiado peso en nuestras mentes, si esa carga puede afectar nuestra sombra y, por ende, nuestras intuiciones. En momentos así, puede surgir el repentino deseo de actuar con más firmeza, de ocultar nuestras inseguridades bajo una máscara de aparente seguridad. Aunque este enfoque pueda parecer estándar, es sorprendentemente efectivo.

Conocer nuestras intuiciones es un arte que requiere reflexión constante. Observar cómo nos sentimos, cómo actuamos y cómo tomamos decisiones en un día cualquiera es el primer paso. Periódicamente debemos darnos espacio para reflexionar, haciendo preguntas profundas sobre nuestras motivaciones y elecciones.

¿Por qué tomé esta decisión en particular? ¿Había algo que deseaba lograr de manera diferente? Estas indagaciones nos permiten ahondar en nuestra propia psique, desentrañando los hilos de nuestras intuiciones. La práctica de la reflexión puede ser incorporada en nuestra rutina diaria o realizada cuando tengamos un momento tranquilo para nosotros mismos.

Podemos simplemente meditar sobre ello o, aún mejor, escribir nuestros pensamientos y reflexiones. Esta forma de introspección se conoce comúnmente como llevar un diario, una herramienta invaluable para explorar nuestras profundidades internas. Examinar nuestra sombra es otro aspecto crucial en el camino hacia el autoconocimiento.

Es un proceso desafiante y continuo, pero increíblemente gratificante. Al identificar lo que reprimimos en nuestro ser, descubrimos impulsos ocultos que moldean nuestras intuiciones. Conocerlas es adentrarse en el oscuro laberinto de nuestra psique, pero es el camino hacia la comprensión y la integración de todos los aspectos de nosotros mismos.

Otro elemento importante que influye en nuestras sensaciones instintivas son los arquetipos colectivos. Identificar los arquetipos presentes en nuestro inconsciente nos brinda una mayor comprensión de nuestras intuiciones. Reconocer estos patrones arquetípicos nos permite comprender mejor nuestras reacciones y percepciones ante diversas situaciones.

Los diferentes tipos de personas se pueden categorizar de diversas maneras y una forma común es a través de los arquetipos junguianos. Estos arquetipos representan patrones de comportamiento y características psicológicas que se encuentran en todas las culturas y épocas.

Te invito a que descubras cual o cuales son tus comportamientos y por tanto tu arquetipo:

El héroe. Este es un valiente luchador que cree firmemente en que, con suficiente esfuerzo y trabajo duro, puede conquistar cualquier desafío. Sus intuiciones están arraigadas en una fe obstinada en sus propias capacidades, a veces incluso en la arrogancia. Deberá fluir más para poder conectar mejor con su interior.

El cuidador. Este arquetipo se preocupa profundamente por los demás, a menudo más que por sí mismo. Su intuición se manifiesta en el pensamiento y la acción altruistas, poniendo las necesidades de los demás por encima de las propias. Deberá acallar la mente para conectar mejor con su Ser.

El creador. Caracterizado por su creatividad y habilidades artísticas, el creador es innovador y tiene un talento especial para encontrar soluciones creativas a los problemas. Sus intuiciones a menudo los guían hacia nuevas ideas y proyectos originales. Es e que mejor está conectado de todos! Si ese eres tú, enhorabuena!

El rebelde. Este tipo de persona disfruta desafiando las normas establecidas y creando sus propias reglas. A menudo puede ser destructivo, pero su intuición los impulsa a buscar la libertad y la autonomía por encima de todo. Deberá trabajar en la aceptación para ampliar aún más su intuición.

El tramposo. Con un sentido del humor juguetón, el tramposo busca la diversión y los buenos momentos en la vida, a menudo metiéndose en problemas. Sus intuiciones pueden inclinarse hacia situaciones lúdicas y engañosas. Si eres de estos, una buena dosis de honestidad y responsabilidad siempre ayudan!

El sabio. La honestidad y la búsqueda de la verdad son fundamentales para el sabio. Siempre busca la sabiduría y la claridad en todas las situaciones, y sus intuiciones están guiadas por un deseo de autenticidad y conocimiento profundo.

El gobernante. Este arquetipo se siente cómodo en posiciones de liderazgo y busca controlar su entorno. Sus intuiciones están influenciadas por el deseo de mantener el poder y la autoridad, buscando oportunidades para aumentar su influencia y liderazgo. Deberá acallar la mente y conectarse al corazón.

Estas intuiciones, que se manifiestan de manera más clara cuando nos conocemos bien, revelando mucho sobre nosotros mismos y nuestras tendencias innatas. Por ejemplo, al identificarnos con el arquetipo del cuidador, es probable que nuestras intuiciones se centren en la preocupación por los demás y en la tendencia a actuar en función de las necesidades de los demás. Esta identificación con un arquetipo específico puede influir en la forma en que percibimos y respondemos a diversas situaciones.

Por último, es interesante que sepas que hay dos tipos principales de intuiciones: la intuición introvertida y la extrovertida.

La intuición introvertida se caracteriza por un enfoque en el pensamiento interno, el reconocimiento racional y la identificación de patrones. Busca información internamente, confiando en la capacidad de resolver acertijos o predecir el futuro basándose en pistas internas.

La intuición extrovertida explorar nuevas posibilidades y buscar soluciones innovadoras, captando oportunidades en el entorno externo. Este tipo de intuición permite a las personas adaptarse rápidamente a nuevas situaciones y ver conexiones entre eventos aparentemente no relacionados.

¿Con cuál te identificas más?

En resumen, explorar y mejorar la intuición implica un profundo viaje de autoconocimiento, reconociendo nuestras sombras y arquetipos internos. Mediante la introspección y la comprensión de nuestros patrones inconscientes, podemos desarrollar una intuición más afinada y consciente, enriqueciendo nuestras vidas de manera significativa.

terapia psychk malaga
havening techniques malaga

terapia emocional malaga

La rendición: No eres la mamá que yo necesitaba

Herida de traición materna

Sanando la herida materna de traición: Un viaje hacia la autoaceptación y la sanación emocional

La relación entre madre e hijo es una de las conexiones más fundamentales en la vida de una persona. Sin embargo, cuando esta relación está marcada por la ausencia emocional o la falta de cuidado, puede dejar una herida profunda en el alma de la persona. Esta herida, conocida como la herida materna de traición, se refiere a la sensación de haber sido traicionado o defraudado por alguien en quien se confiaba. Esta traición puede manifestarse de diversas formas, como engaño, deslealtad, falta de atención, consuelo o presencia materna durante la infancia o falta de fiabilidad. En el contexto de la relación madre-hijo, la herida de traición surge cuando la madre no cumple con las expectativas del niño de ser confiable, protectora y solidaria.

La traición materna puede adoptar diversas formas, todas ellas dejando una marca duradera en el desarrollo emocional y psicológico de la persona. La falta de atención emocional puede hacer que el niño se sienta ignorado o desatendido, mientras que la ausencia física o emocional de la madre puede dejar al niño sintiéndose solo y desamparado.

La falta de consuelo o apoyo emocional cuando más se necesita puede provocar sentimientos de abandono y falta de valoración. Además, la incapacidad de la madre para estar presente en momentos importantes de la vida del niño puede generar una sensación de invalidez y desconfianza en las relaciones futuras.

Niña interior
sanar a tu niña interior.

Trabajar con la herida materna de traición implica un viaje de autoexploración y sanación emocional. Esto incluye procesos terapéuticos para abordar el dolor emocional arraigado, reconectar con las necesidades no satisfechas del niño interior y aprender a desarrollar una relación más compasiva y amorosa con uno mismo. Es un proceso que requiere valentía y vulnerabilidad para confrontar las heridas del pasado y permitirse sentir y sanar.

Aceptar que no se tuvo la madre deseada puede ser un desafío abrumador pero sin duda tremendamente liberador.

Es un acto de rendición a la realidad, reconocer que las expectativas no cumplidas no son culpa del individuo. Es dejar ir la culpa y la vergüenza asociadas con esas expectativas no cumplidas y encontrar paz en la aceptación de lo que fue y es.

En última instancia, sanar la herida materna de traición implica un viaje hacia la autoaceptación y la comprensión. Es aprender a perdonar a mamá y a uno mismo por las imperfecciones y limitaciones humanas. Es encontrar amor y compasión a nuestro niño interior herido y aprender a cultivar relaciones saludables basadas en la confianza y el cuidado mutuo.

Es un proceso continuo de crecimiento y transformación que conduce sin duda a una mayor plenitud y bienestar emocional en la vida adulta, así como a evitar repetir dichos patrones con nuestros descendientes.

Si deseas comenzar tu proceso pincha aqui: Niñ@ interior y Constelación

terapia psychk malaga
havening techniques malaga
terapia emocional malaga 
Niña interior malaga
niña interior madrid
kinesiologia del alma madrid 
kinesiologia del alma granada
kinesiologia del alma malaga

El poder de hacerse preguntas transformadoras

Preguntas trasnformadoras preguntas poderosas

En la travesía de la vida, nos encontramos constantemente ante la necesidad de explorar nuevas perspectivas, de crecer y de manifestar nuestras metas y deseos. En este viaje de autodescubrimiento, una herramienta poderosa y subestimada es la capacidad de formularnos buenas preguntas. Teniendo en cuenta que somos energía y vibramos en distintas sintonías a lo largo del día este proceso de preguntas no solo es esencial para la expansión personal, sino que también se alinea con las infinitas posibilidades que existen en la vida desde la atracción y la vibración.

La importancia de hacerse preguntas poderosas conexiona la mente, la realidad, y la forma en que nuestras creencias y pensamientos pueden influir en nuestra experiencia de vida. Esto es clave para desbloquear potenciales ocultos y avanzar hacia la realización personal.

Por lo tanto, es esencial comprender  “la importancia de la mente en la manifestación de la realidad”

Para que comiences con este proceso te doy 10 ejemplos de preguntas transformadoras:


  1. ¿Qué más creencias limitantes puedo soltar hoy?

  2. ¿Qué más puedo solucionar hoy?

  3. ¿Que más positivo es posible que suceda hoy?

  4. ¿Cómo puedo cultivar la gratitud diaria para atraer más abundancia a mi vida?

  5. ¿Cómo puedo expandir mi negocio hoy?

  6. ¿Cómo es la energía de ser yo?

  7. ¿Qué más es posible crear en confianza?

  8. ¿Qué elecciones pueden tomar que vaya a crear más de todo lo mejor para mí y el planeta?

  9. ¿Cómo puedo cultivar una mentalidad de abundancia?

  10. ¿Qué me tomaría para tener más pensamientos capacitantes?

Estas preguntas, en su esencia, van más allá de la simple búsqueda de respuestas; son herramientas para desencadenar procesos internos que pueden conducir a transformaciones significativas en la forma en que experimentamos la vida.

Al abrazar la importancia de hacerse preguntas significativas, abrimos la puerta a la posibilidad de vivir una vida más plena, consciente y alineada con nuestros verdaderos deseos.

En este viaje, te invito a que explores la conexión entre las preguntas y su sincronización con la manifestación de una realidad más rica y satisfactoria.

terapia psychk malaga
havening techniques malaga

terapia emocional malaga

Navegando la Vida Diaria con No Juicio, Neutralidad y Presencia: Un Enfoque Práctico y Holístico

No Juicio, Neutralidad y Presencia

En el bullicio de la vida cotidiana, encontrar un equilibrio emocional puede parecer un desafío insuperable. Sin embargo, la práctica del no juicio, la neutralidad y la presencia ofrece herramientas concretas y científicamente respaldadas para mejorar la calidad de vida, incluso para aquellos que no son asiduos meditadores o introspectivos.

La ausencia de juicio implica liberarse de preconcepciones y evaluaciones automáticas, permitiendo una perspectiva más abierta y compasiva hacia los demás y uno mismo. La neutralidad, por su parte, nos invita a ser observadores imparciales de nuestras emociones y pensamientos, fomentando una respuesta más equilibrada a las situaciones de la vida.

Me dirás que te resultan, cuanto menos complicadas, dichas prácticas. Si, lo escucho a diario a pacientes y alumnos. Pero ante eso existe una gran aliado: La práctica.

En uno de mis viajes a Palma de Mallorca recuerdo atender a Armin, un chico Alemán que “huía” de convertirse en una persona tan crítica como lo había sido su madre (quizá te resulte familiar). A través de ejercicios que le ayudaron a cambiar patrones heredados y creencias limitantes, Armin, con mucha intriga y diversión, se puso a practicar la neutralidad y el no juicio. Después de simplemente 10 días de práctica sus palabras fueron “No sé cómo he podido gestionar mi vida antes sin esta nueva perspectiva que tomo ahora”

Numerosos estudios respaldan los beneficios del no juicio y la neutralidad en la salud mental, reduciendo el estrés y la ansiedad. Además, la presencia, o la capacidad de estar plenamente en el momento presente, ha demostrado fortalecer la resiliencia emocional y mejorar la concentración.

Aplicar estos principios de manera práctica implica, por ejemplo:

“Tomar pausas breves durante el día para respirar conscientemente y observar nuestros pensamientos sin juzgarlos.”

La implementación de estos hábitos simples pero poderosos transforma la experiencia diaria, mejorando la gestión del estrés y fomentando relaciones más saludables.

Desde una perspectiva holística, estas prácticas no solo benefician la salud mental, sino que también contribuyen al bienestar espiritual. Al adoptar una actitud de no juicio, neutralidad y presencia, se crea un espacio para el crecimiento personal y la conexión con dimensiones más profundas de uno mismo, de la existencia y de nuestra verdadera naturaleza energética.

En la búsqueda de  mejoras emocionales, estas prácticas se han integrado en enfoques terapéuticos contemporáneos, como la terapia cognitiva-conductual, respiraciones, terapia integrativa subconsciente y el mindfulness. Los terapeutas que incorporamos estos principios ofrecemos herramientas adicionales para enfrentar los desafíos diarios, saboteo emocional y promover una transformación positiva, profunda y permanente en el tiempo.

Para aquellos que buscan información práctica y científicamente respaldada, estos principios se presentan como una valiosa alternativa, accesible para todos. En el mundo de terapias la inclusión de estas prácticas es un factor diferenciador para aquellos que desean abordar sus problemas desde un enfoque integral y efectivo.

La práctica del no juicio, la neutralidad y la presencia no solo es beneficioso para la salud mental, sino que también abre puertas hacia una vida más plena y significativa. Al adoptar estos principios de manera práctica y constante, incluso aquellos menos familiarizados con la meditación o la introspección experimentarán mejoras notables en su bienestar emocional y espiritual.

En la encrucijada de la vida moderna, la práctica del no juicio, la neutralidad y la presencia emerge como un faro de serenidad y transformación.

Con más de una década de experiencia, mis sesiones de terapia holística fusionan la efectividad comprobada con la simplicidad en las prácticas, guiándote hacia una transformación profunda y duradera. No solo te embarcarás en un viaje hacia el equilibrio interior, sino que también encontrarás la clave para una vida plena y significativa ¿A qué esperas?

Ejercicio con tu niña interior

Niña interior

Carl Gustav Jung, un influyente psicólogo suizo, introdujo la idea de que la psique está compuesta por diversas partes, y una de ellas es el “niño interior”

El concepto de “niño interior” en psicología jungiana se refiere a una parte de la psique humana que representa la experiencia y la expresión de la infancia dentro de la psique de un adulto.

El niño interior no se refiere simplemente a la edad cronológica de la infancia, sino más bien a las experiencias emocionales, las heridas, las alegrías y los patrones de comportamiento que se formaron durante la infancia y que aún tienen un impacto en la vida del individuo adulto. Estas experiencias pueden ser tanto positivas como negativas y pueden influir en la forma en que una persona se relaciona consigo misma y con los demás.

Algunas características asociadas con el niño interior pueden incluir la espontaneidad, la creatividad, la curiosidad, pero también pueden surgir aspectos más vulnerables o heridos que puedan necesitar atención y curación. La idea es que reconociendo y conectando conscientemente con el niño interior, una persona puede comprender mejor sus patrones de comportamiento, superar traumas no resueltos y trabajar hacia la integración y el equilibrio psicológico.

Cada día aplico técnicas en mis sesiones para explorar y trabajar con el niño interior.

Estos procedimientos de terapia implican trabajar con:

  • La imaginación activa: Como medio de conexión con el niño.

  • El diálogo interno para darnos recursos a nosotros mismos desde el entendimiento actual de la vida

  • La introspección: Como medio de conocimiento y por tanto de aplicar las habilidades adecuadamente.

  • Regresión a la infancia: Que facilita la vivencia y así poder abordarla con herramientas más constructivas.

Estos enfoques buscan ayudar a mis consultantes y alumnos a sanar heridas emocionales, liberar bloqueos emocionales, experiencias traumáticas, creencias limitantes y desarrollar una conexión más consciente, estable y saludable con su niño interior.

Problemas derivados de no estar en conexión con el niño interior

La desconexión con tu niño interno dará lugar a problemas psicológicos y emocionales muy comunes, como:

  • Bloqueo emocional: Si una persona no está conectada con su niño interior, tendrá dificultades para expresar y comprender sus propias emociones,  lo que se traduce en bloqueos emocionales, donde existen emociones no procesadas o reprimidas que afectan la salud mental.
  • Patrones de comportamiento repetitivos: Los patrones de comportamiento formados durante la infancia persisten en la vida adulta. Sin conexión con el niño interior, se repiten patrones disfuncionales, sin ser consciente uno de ello.
  • Falta de autenticidad: Sin la conexión con el niño interior se está desconectado de nuestras necesidades, deseos y autenticidad emocional, y podemos sentirnos perdidos o insatisfechos en la vida.
  • Dificultades en las relaciones: Cuando falta una buena conexión con nuestro niño, manifestaremos patrones de relaciones poco saludables, dificultades para establecer límites o dificultades para confiar en los demás.
  • Falta de creatividad y juego: Doy gran énfasis en mis sesiones a “poner tiempo y foco en la creatividad ya que el niño interior está totalmente asociado con ella, con la imaginación, ingenio para solucionar problemas y la capacidad de juego. La desconexión de estas cualidades llevará a una sensación de estancamiento en la vida y la pérdida de la capacidad de disfrutar de actividades lúdicas. Asi que no olvides desarrollar y practicar actividades creativas “a diario”!
  • Problemas de autoestima: La autoexploración y la aceptación de las partes vulnerables de uno mismo son esenciales para construir una sólida autoestima, y cuando hacemos trabajo con nuestro niño tomamos consciencia de esas partes para fortalecerlas o sanarlas.

Ejercicio con tu niña interior:

La visualización con el niño interior es una técnica utilizada en terapia y desarrollo personal para reconectar con aspectos emocionales y experiencias de la infancia.

Este ejercicio te ayudará a explorar y comprender mejor tus emociones, así como a fortalecer la conexión emocional contigo mismo. Puedes repetir este ejercicio tanto como lo sientas necesario y ajustarlo según tus necesidades específicas.

  1. Encuentra un lugar tranquilo: Siéntate o acuéstate en una posición cómoda.

  2. Respira profundamente: Inhala profundamente por la nariz, retén el aliento por un momento y exhala lentamente por la boca. Repite este proceso varias veces hasta que te sientas relajado.

  3. Visualiza un lugar seguro: y tranquilo, como un jardín, una playa, una nube, un bosque… donde te sientas calmada y segura.

  4. Pídele a tu niña interior que te acompañe: Imagina que aparece tu niña, tal vez de 4, 5 ó 6 años. Cualquier edad que llegue es perfecta. Visualiza qué ropa lleva y cómo se siente.

  5. Establece una conexión con ella: Acércate a ella con cariño y amor. Puedes hablarla, abrazarla o simplemente estar presente. Observa sus expresiones y gestos, y permítete sentir emociones asociadas. Estas en un lugar seguro.

  6. Conversación:

  • Comienza diciéndole como la admiras por todo lo que ha sido capaz de hacer.

  • Explícale que tu siempre estás a su lado.

  • Dile lo mucho que la amas.

  • Ofrécele apoyo, comprensión y amor.

  • Asegúrale que estás allí para ella.

  • Agradécele su presencia y la conexión hoy contigo.

  • Dile que vendrás más a menudo y despídete de ella.

  1. Abre los ojos: Cuando te sientas listo y regresa al momento presente.

Considero que la terapia del niño interior es esencial para abordar heridas emocionales y promover el crecimiento personal.

Trabajar en esta conexión mejora notablemente la salud mental, fortalece las relaciones y promueve un sentido profundo de equilibrio interno.

Confío esta información te haya sido de gran ayuda y te invito a comentarme tus experiencias al respecto.

Abrir chat
1
Hola, ¿tienes alguna duda con lo que has leído?